Reseña
De La pérgola de las flores, esta tonada se perfilaría como un canto al mundo rural de los inicios del siglo XX. Su autor, Francisco Flores, nos habla a través de ella de un Chile que, comenzando a sentir la velocidad de la modernidad, y al tiempo que disfrutaba de sus avances tecnológicos, evocaría con frecuencia las bondades del mundo campesino como espacio fundante, forjador de nuestra identidad.
“Campo lindo”, en la obra, dialoga con otras tonadas, con la cueca, con ritmos de vals, foxtrot y charleston, atisbos de zarzuela y de cabaret alemán. Con un marcado estilo nostálgico, esta canción se insertaría en la escena dando cuenta de la heterogeneidad de la sociedad de la época, una sociedad que, no sin contradicciones, concebía espacios abiertos y palpables para lo urbano y lo rural, lo antiguo, lo moderno, lo nacional y lo foráneo.
Luego de su estreno en abril del año 1960, La pérgola de las flores se convertiría en un fenómeno de la cultura popular masiva, logrando rápidamente un amplio reconocimiento internacional. Su trabajo literario, musical y teatral, delineado prolijamente por sus creadores, no solo lograría presentar una viva imagen del país de antaño, sino que reflejaría a la perfección la naturalidad con que, en el terreno de lo popular, surge la conversación entre mundos y culturas diferentes. De allí su éxito, su vigencia y actualidad.